Jan Kath ha introducido en su colección Classic motivos de revestimientos de pared italianos y saris indios. Los diseños atemporales y discretos confieren a cualquier habitación un ambiente de nobleza.
Estos patrones clásicos sirven también de fundamento a la colección Erased Classic. Se disuelven los adornos ordenados y estrictos de la alfombra. En algunos puntos, parece que las repeticiones que en origen eran perfectas han sido borradas, regadas con ácido y reparadas. Así surge un lenguaje formal completamente nuevo. Los clientes pueden determinar según su gusto personal hasta qué punto se deja avanzar esta «erosión», al igual que los demás elementos, como color, materiales, tamaño, grosor de nudo y diseño. Jan Kath se siente estimulado por la estética de lo decadente y lo pasajero. En este sentido, le han servido de inspiración sus visitas a las metrópolis de todo el mundo y, de un modo determinante, a su propia patria, la cuenca del Ruhr. Le interesan especialmente las minas en ruinas, los pabellones industriales en descomposición y la naturaleza, que vuelve a conquistar su espacio, así como la tensión entre lo viejo y lo nuevo. Precisamente en emplazamientos relacionados con la cultura industrial se escenificó la sesión de fotografías para el catálogo actual: los adornos destruidos de la alfombra son el eslabón que une el aspecto basto de los edificios y la nobleza de los materiales. «Lo perfecto y lo evidente aburre a nuestros ojos», afirma Kath. Así, el diseñador declara a la vez su fascinación por las alfombras tejidas a mano: «Las máquinas no cometen errores. Nuestros tejedores de las pequeñas fábricas de Katmandú hacen sin duda un trabajo perfecto, pero siempre surgen irregularidades debidas a la propia esencia de los materiales naturales trabajados a mano. Estos «errores programados» son los que dotan de vida e inspiración a las alfombras. Desempeñan un papel determinante en el establecimiento de la profundidad del diseño.